8.1. El entorno general y el entorno específico
Vídeo explicativo. Entorno general y entorno específico.
En el año 2006 se construyeron
casi 800.000 casas en España. Solo 5 años después en 2011, se construyeron
70.000. En 2006, muchas compañías competían por fabricar el móvil más pequeño
posible. En 2020, la gran mayoría de móviles vendidos tenía más de 5 pulgadas. En
el verano de 2019 los hoteles estaban llenos, y en 2020 apenas llegaban al 50%.
¿Qué ha pasado? Pues que ha habido un cambio en el entorno, lo que es decisivo
para las empresas.
El entorno son todos los factores que rodean a la empresa. Estos
factores pueden ser tanto beneficioso como perjudiciales, por lo que pueden ser
decisivos en los beneficios de las empresas.
Habitualmente se diferencian dos tipos de entorno: el general y el
específico.
1. Entorno general
El entorno general son factores que afectan por igual a todas las
empresas de una determinada región. Para conocer estos factores la análisis
PEST (Político-legal, Económico, Sociocultural y Tecnológico).
Factores político-legales. Las políticas económicas del gobierno y las
distintas leyes que regulan la actividad económica pueden ser claves para la
empresa. Nos referimos a toda la legislación que debe cumplir una empresa, como
prevención de riesgos laborales, normas de competencia, de publicidad, de
protección de medio ambiente etc. Por supuesto, también es son clave los
impuestos y seguridad social que hay que pagar. Así, el confinamiento y la aplicación de muchas restricciones con el
COVID-19 ha sido clave para que la gente no viaje y acuda menos a hoteles
Factores económicos. La situación general de la economía, los
tipos de interés, el desempleo existente, el nivel de desarrollo del país etc.
son factores que pueden hacer que una empresa venda más o menos, o que pueda
producir más o menos barato. No cabe duda
que la crisis económica, que nos llevó a un 27% de paro en 2013, perjudicó a
cientos de miles de empresas en España (como las de la construcción). Por otro
lado, países poco desarrollados pueden ser poco atractivos para vender, pero sí
para producir. Esto explica por qué muchas grandes empresas se van a producir a
países poco desarrollados.
Factores socioculturales. Se refiere a factores como el nivel
educativo, los estilos de vida, los hábitos de consumo, etc. Todos estos
factores también influyen en las ventas de las empresas. Por
ejemplo, en los últimos años hay cada vez una mayor sensibilidad por la
alimentación y el medioambiente, lo que ha provocado un gran boom en la
producción de productos ecológicos.
Factores tecnológicos. Los cambios tecnológicos influyen en los
productos que una empresa puede fabricar. Los continuos avances hacen que los
productos se queden obsoletos cada vez antes y las empresas deben reaccionar
para no quedar anticuadas. Los grandes
avances en internet han sido claves para el desarrollo de gran cantidad de
aplicaciones y programas que hacen la vida mucho más fácil a las empresas.
El entorno específico son los factores más cercanos, e influyen en un
conjunto de empresas que tengan unas características comunes o estén en un
mismo sector.
Podemos diferenciar los siguientes factores.
Clientes. El número de clientes y el comportamiento de
los mismos supone un factor clave que afecta a las decisiones de la empresa. Las
decisiones de una empresa pueden cambiar mucho según el tipo de clientes que
tenga. En el año 2014, Telepizza lanzó la
“pizzalada” una ensalada que venía encima de una pizza. El fenómeno se hizo
viral… hasta que la gente empezó a probarla. Resulta que la mayoría de la gente
que quiere una pizza no desea una ensalada encima, y el que quiere una ensalada,
no va a una pizzería. Hay que conocer a tus clientes.
Proveedores. Las acciones de los proveedores pueden ser
claves para una empresa también. Es importante saber el poder que tienen los
proveedores para poner precios más altos o bajos y si respetan los acuerdos. Por
ejemplo, si tus proveedores no te traen los pedidos a tiempo, es posible que no
puedas atender a tus clientes.
Competidores. Muchas veces los competidores condicionan
el comportamiento de una empresa. Para
una empresa es clave conocer el número de competidores que tiene y la manera en
la que se comportan. Por ejemplo, recientemente
hemos visto como Vodafone ha llegado a ofrecer todo el fútbol por 6 euros al
mes, lo que condicionó a sus competidores a tener que bajar el precio para
poder competir.
Intermediarios. A veces, las empresas dependen de
intermediarios para hacer llegar el producto a los clientes. En algunos
sectores estos intermediarios tienen gran poder, lo que influye en los ingresos
que obtienen las empresas. Esto sucede en
las empresas agrícolas, que pueden recibir un precio hasta diez veces inferior
al precio que luego sus productos son vendidos en el mercado.
De esta manera, vemos como el
entorno puede influir mucho en la realidad de las empresas. Sin embargo, las
empresas también tienen una influencia en el entorno en el que viven. Por ello,
es importante que tengan una responsabilidad social.